YIHADISTAS CONTRA CRISTIANOS, ¿POR QUÉ?


El terrorismo se puede definir como una forma violenta de lucha, mediante la cual se persigue la destrucción del orden establecido o la creación de un clima de terror e inseguridad susceptible de intimidar a los adversarios o a la población en general.
El año 2019 ha comenzado con una intensa actividad llevada a cabo por el terrorismo yihadista, Nos duelen todas y cada una de las víctimas, y tenemos muy claro que el terrorismo nunca tiene razón ni atiende a razones. Pero ante la creciente ola de los ataques yihadistas cometidos contra cristianos en diversas partes del mundo, es inevitable pararnos para analizar qué pretenden conseguir los distintos grupos yihadistas con la muerte de estos hermanos y hermanas de Filipinas, Egipto, Siria, Paquistán, Singapur, Malasia, Malí, Ski Lanka, Burkina...
Son distintos los objetivos que, según consideramos, se propone el Estado Islámico (que engloba al grueso de los grupos yihadistas). Aquí vamos a tratar de enumerarlos, con la advertencia de que el orden no implica priorización:
En primer lugar, los cristianos son símbolos evidentes del carácter multicultural y multiconfesional de las regiones arriba señaladas, algo que el Estado Islámico quiere hacer desaparecer en beneficio de una sociedad uniformemente musulmana.
En segundo lugar, los ataques dirigidos contra minorías religiosas (como los cristianos, pero también contra chiítas y yazidíes) se proponen enfrentar a estos grupos contra la comunidad preponderante, socavando así la estabilidad de los Estados en que habitan.
En tercer lugar, los ataques contra minorías religiosas puedan ser considerados como un intento del Estado Islámico por restaurar su gravemente dañada imagen tras la derrota en Siria. Intento que, además, le mantiene presente en la cobertura mediática occidental.
En cuarto lugar, estos ataques podrían estar destinados a provocar intervenciones de las potencias occidentales (Estados Unidos y la Unión Europea). Ello confirmaría la afirmación del Estado Islámico, de que el Islam se halla en guerra con el resto del mundo.
Y en quinto lugar, podría buscarse que, en Occidente, el terror contra los cristianos alimentara la islamofobia. Ésta podría, a su vez, empujar a algunos musulmanes a radicalizarse y abrazar el extremismo yihadista, impulsándose así un fatal círculo vicioso.
Descansen en paz todas las víctimas del cualquier tipo de terrorismo.
Julia Aguilar
Fuentes:


Comentarios