LAS NOTICIAS DE LA SEMANA: 8 A 15 DE FEBRERO

De  Pablo Toscano/OXFAM INTERMÓN - Archivo 
Volvemos a comenzar una entrada centrada en las noticias de la semana dirigiendo nuestra mirada hacia Burkina Faso. Oxfam alerta del efecto que está provocando en este país una inseguridad que, lejos de remitir, se está acentuado. "La situación humanitaria es bastante preocupante", reconoce el responsable del programa para la generación de resiliencia y acción humanitaria de esta organización, y añade que "va de mal en peor". Pone especial énfasis en señalar las dificultades cada vez mayores que encuentran para acceder a determinadas zonas las organizaciones humanitarias que tratan de asistir a la cifra cada vez mayor de personas necesitadas de ayuda.
Desde enero de 2018 se han contabilizado 288 incidentes de seguridad, de ellos 137 en la región del Sahel, y han fallecido 290 personas.
Ya en 2019 se han producido nuevos ataques y esta misma semana las fuerzas de seguridad han llevado a cabo varios operativos en el norte, en los que han muerto casi 200 terroristas, según han informado las autoridades del país. Además, también se están intensificando los enfrentamientos intercomunitarios en Yirgou que se saldaron con 49 muertos y miles de desplazados. Y ell pasado fin de semana fueron secuestrados en el norte cuatro trabajadores de la Cruz Roja Burkinesa.
Esta situación sobre todo está afectando a los medios de vida de la población. "Los ataques contra la población en días de mercado y contra ciertos comerciantes han contribuido a ralentizar el sistema económico",
Aunque este año ha habido una cosecha "relativamente buena" a nivel nacional, más de 3,7 millones de burkineses, o lo que es lo mismo el 21 por ciento de la población, se enfrentarán a problemas de acceso a alimentos, incluidos "676.200 que necesitarán ayuda alimentaria urgente en el periodo de carestía que va de junio a agosto". 
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Los intentos globales por lograr una migración segura han chocado con la oposición de muchos países donde los partidos de extrema derecha han entrado en el ámbito político.
El mes de diciembre pasado, 156 países firmaron en la ciudad marroquí de Marrakech el Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular. El conocido de modo más común como Pacto Migratorio Mundial (PMM)
El Pacto se articula en torno a dos dimensiones fundamentales: una, el reconocimiento de que la migración resulta un factor clave de desarrollo; la otra, que los derechos humanos deben primar en el abordaje de los flujos migratorios.
Admitiendo la inevitabilidad de las migraciones, el PMM trata fundamentalmente de ofrecer un marco favorable para reducir los costes humanos y sociales que éstas comportan. También tiene entre sus 23 objetivos el de minimizar los factores adversos y estructurales que obligan a las personas a abandonar su país de origen.
Sin embargo, pese a los intentos por mantener un cierto equilibrio entre las medidas protectoras de los migrantes y aquellas dirigidas a controlar la movilidad, el Pacto se ha encontrado con la oposición de un significativo grupo de países. 
El país  más relevante de quienes han manifestado su rechazo es Estados Unidos. En Europa han sido los países de la Europa del Este los más reticentes, al igual que lo fueron con la acogida de refugiados contraviniendo los compromisos en el seno de la Unión Europea, tal como ha ocurrido con Bulgaria, Croacia, Eslovaquia, Estonia, Hungría, Letonia, Lituania, Polonia y República Checa, países gobernados en su mayoría por fuerzas políticas conservadoras o populistas y con bajas tasas de población inmigrante. También Suiza, Austria e Italia,  han dejado pendiente la adhesión al Pacto de la decisión de su Parlamento, y que es de prever que lo rechazarán. 

La Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía. Ha hecho público el Informe Frontera Sur 2019. Reflexionemos sobre algunos datos:
Al menos, 1.064 inmigrantes han muerto o desaparecido en la denominada Frontera Sur española durante 2018, una cifra que supone cuatro veces más que el año anterior y el mismo número que la suma de los últimos cinco años.
Esta organización ha certificado 499 muertes y otras 565 personas siguen desaparecidas tras naufragios de embarcaciones que intentaban llegar a las costas andaluzas, Ceuta, Melilla, Baleares, Canarias y el levante español, zonas a las que llegaron 64.120 inmigrantes, más del doble que el año pasado y el número más alto desde que existen registros.
Una cifra de fallecidos y desaparecidos que sólo fue superada en 30 años de migración en 2006 con la "crisis de los cayucos" y que sobrepasa todos los asesinatos provocados durante décadas por ETA.
Julia Aguilar

Comentarios

  1. Pues si. Esta es la realidad en Burkina Faso.
    Nuestra comunidad como otras muchas seguimos aquí al lado de esta gente e intentando levantarnos cada día con la ilusión y la esperanza renovadas.
    El mal no tendrá la última palabra, eso lo creemos firmemente y sabemos q Dios no lo permitirá.
    Todos estos niños, jóvenes y familias tienen derecho a creer que todo no va a ir tan mal porque ellos mismos intentan aportar su buen grano.... Y un día dará su fruto.
    Gracias a todos los que seguís creyendo en este pueblo...
    Un abrazo
    Rosario

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